La cebolla (Allium cepa L.) Tiene su centro de origen en Asia Central (montañas de Tien-Shan, en el norte de Irán, Afganistán y Pakistán, y en Uzbekistán, Turkmenistán y Tajikistán), donde se domesticó hace más de 5000 años. Se cultivaba en Egipto en tiempos del Antiguo Reino (2700 a. C.) y también en Mesopotamia. Fue cultivada por griegos y romanos, no sólo por su valor culinario, sino también por sus propiedades medicinales. A pesar de que era una especie habitual en el entorno mediterráneo (se considera el Mediterráneo y Oriente Medio centros secundarios de diversificación), la gran expansión del cultivo en Europa no tuvo lugar hasta la Edad Media.
Históricamente España ha sido un importante país productor de cebollas y cuenta con numerosas variedades locales, algunas de las cuales han sido seleccionadas y cruzadas para obtener variedades comerciales de gran distribución internacional.
Respecto a Canarias, no hay constancia del cultivo de cebollas en épocas prehispánicas, por lo que debió introducirse después de la Conquista. La primera cita sobre su cultivo data de 1537 en la isla de Gran Canaria. Pero es a partir del s. XIX cuando comenzó a tomar gran relevancia en las islas, iniciándose la exportación a Cuba y otras zonas de América. Ya a finales de ese siglo fue de gran importancia el envío de cebollas al mercado americano, mientras que todas las semillas eran dirigidas a Inglaterra, para probablemente ser enviadas a las colonias inglesas de ultramar. Efectivamente en ese momento, la cebolla fue un cultivo básico para la economía de las colonias inglesas como las islas Bermudas, las cuales dependían de la producción de semillas de Tenerife.
La producción de semilla de cebolla para la exportación al continente americano fue también cobrando una gran importancia. A finales del s. XIX se produjo la primera introducción de semillas de la variedad conocida como “Bermuda onion” en el estado de Texas, en EEUU. Esta variedad, al contrario de las que se cultivaban en ese momento en América, era de producción temprana y sabor dulce y suave. Desde 1903 a 1910, Tenerife comenzó a exportar semillas de tres variedades, las conocidas en Estados Unidos como White Bermuda (Yellow Bermuda), de color amarillo claro, Crystal Wax de color blanco, y Red Bermuda de piel roja, todas ellas variedades tempranas, muy productivas, de suave sabor y no muy buena conservación. En 1921, se identificaron en Tenerife tres variedades de cebollino, Blanco Cristal, Palmero y Rosado. Es posible que cada uno de esos nombres fuera el sinónimo canario de los nombres americanos.
Desde los años veinte, había tenido lugar una gran demanda de semillas desde Tenerife, lo que contribuyó al declive de su calidad. Así, a mediados de los años cuarenta, la cebolla Bermuda, que durante décadas había sido la más apreciada en el mercado americano, con el tiempo llegó a devaluarse tanto, que los agricultores consideraron la posibilidad de cambiarla por las nuevas variedades que habían llegado desde España en los años veinte, las denominadas Babosa o Grano.
A mediados del s. XX, el cultivo de cebollino para la exportación en la isla había venido a menos, y terrenos que antiguamente se habían destinado a la producción de semillas fueron dedicados a plataneras. No obstante, en la segunda mitad del siglo XX todavía existía un cierto comercio exterior pero muy reducido.
Actualmente, las únicas semillas que se producen en Tenerife corresponden a las variedades locales que de forma tradicional se han mantenido hasta hoy en zonas más o menos aisladas o bien delimitadas de la isla, como son los caseríos de Masca y Los Carrizales en Buenavista del Norte, la costa de San Juan de la Rambla y la zona de Guayonje en Tacoronte.
La superficie en Canarias dedicada al cultivo de la cebolla fue de 378,4 has en 2014, de las cuales 126,2 ha fueron cultivadas en Tenerife. Se producen mayoritariamente variedades comerciales y sólo entre un 10 y un 15% son variedades locales o tradicionales.
El consumo anual estimado en Tenerife se sitúa en torno a las 9.000 t, lo que supone un autoabastecimiento inferior al 35 %. Las preferencias del consumidor son claras, más del 80 % de las cebollas que se encuentran en el mercado son de color amarillo.
Para la caracterización morfológica de las variedades locales de cebolla de Tenerife se utilizaron 32 caracteres, extraídos de los Descriptores internacionales (IPGRI, UPOV). Se estudiaron seis variedades de cebolla de Tenerife. Cada variedad estuvo representada por un número variable de entradas, pertenecientes a la colección del CCBAT.
Estas fichas forman parte de la publicación: Las cebollas de Tenerife. Cultivo y variedades (Tascón, C. 2012), editado por el Cabildo Insular de Tenerife.
Variedad Local | Fotoperiodo | Municipio | Informe |
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Carrizal Alto | Día Intermedio | Buenavista del Norte | Carrizal Alto |
Carrizal Bajo | Día Intermedio | Buenavista del Norte | Carrizal Bajo |
Masca | Día corto | Buenavista del Norte | Masca |
Guanyonje | Día corto | Tacoronte | Guanyonje |
Ramblera rosada | Día corto | San Juan de La Rambla | Ramblera rosada |
Ramblera amarilla | Día corto | San Juan de La Rambla | Ramblera amarilla |