EL CENTRO DE CONSERVACIÓN DE LA BIODIVERSIDAD AGRÍCOLA DE TENERIFE.
En el año 2003, el Cabildo de Tenerife , creó el Centro de Conservación de la Biodiversidad Agrícola de Tenerife - CCBAT, cuyas instalaciones se encuentran situadas en el Puerto de la Cruz. Allí se llevan a cabo muchos trabajos destinados a la conservación de las variedades locales de Tenerife. Veamos qué labores se realizan en el Centro.
Recolección: los agricultores y agriculturas ceden muestras de sus semillas, tubérculos, y púas de frutales; y además, comparten sus conocimientos sobre los usos, peculiaridades, manejo, etc. de las variedades. Todo esto es anotado por los técnic@s en un cuaderno de campo, junto con otros datos técnicos de interés. De esta forma, a cada muestra le acompaña una ficha con toda la información asociada.
Conservación:
Semillas: al llegar al laboratorio, se limpian y seleccionan, eliminando las que estén dañadas. Para que puedan conservarse durante muchos años sin perder la capacidad para germinar, se desecan y se guardan en una cámara a baja temperatura.
Papas: una vez limpias y escogidas, se guardan en una cámara especial, con baja temperatura y humedad ambiental alta, hasta que llega la época de volverlas a plantar. Este proceso se repite todos los años.
Frutales: para conservarlos, existen plantaciones en distintas fincas, donde se encuentran injertadas las variedades de interés. De esta forma, se mantienen las colecciones y, además, se pueden estudiar.
Complementando a esta conservación que tiene lugar fuera de su ambiente tradicional, denominada ex-situ, el CCBAT desarrolla también un programa de conservación in-situ, a través del cual se apoya y asesora a los agricultores en el mantenimiento de las variedades locales en sus propias fincas.
Caracterización: consiste en estudiar las características (peso, forma, color…) de las diferentes variedades locales. También se realizan complejos análisis para estudiar su composición o su estructura genética, ya que, cuanto más conozcamos cada planta o semilla, mejor la podremos conservar.
Documentación: no sólo es importante conservar el material vegetal, sino también todos los datos sobre el mismo. Por ello, toda la información que se recoge, tanto en la recolección como en el laboratorio, se almacena en una completa base de datos informática.
Y nosotros ¿Qué podemos hacer?
Ya sabemos el tesoro que tenemos en nuestras manos. Y sabemos que es importante que no se pierda. A partir de ahora, cuando vayamos al mercado y reconozcamos los productos que hemos estudiado, seguro que los miraremos con otros ojos, porque sabremos que son únicos, y que nos han acompañado a través de nuestra historia. Y cuando los agricultores y agricultoras que conozcamos, incluso nuestros propios abuelos y abuelas, nos enseñen a reconocer un cultivo, o nos cuenten cómo se cuida, prestaremos mucha atención, ya que seremos conscientes del valor que atesoran todos estos conocimientos.